A pesar de que se proyecta una baja de, al menos, 20% en el mercado automotor, la marca del óvalo aumentará su producción en Pacheco para crecer en el mercado externo regional. Sus planes para 2024
Con la mirada puesta en el mercado externo, Ford aumentará su producción de vehículos en un 15%. A pesar de que, para 2024, el sector espera que el mercado automotor se reduzca, al menos, en un 20% respecto al nivel del año pasado, la automotriz estadounidense buscará aumentar sus exportaciones, sobre todo, con su modelo insignia, la pickup Ranger.
«Hicimos una apuesta muy fuerte en Pacheco para producir un vehículo que redefina el segmento», anunció Martin Galdeano, presidente de la compañía para la Argentina y, a partir del 1° de febrero para América del Sur, respecto a la inversión de u$s 660 millones que realizó la automotriz en su planta productiva para producir la nueva Ranger. Después de la inversión, Pacheco tiene capacidad para producir 140.000 vehículos por año. No obstante, según el ejecutivo, no está en los planes de la automotriz sumar un nuevo modelo de producción nacional en el corto plazo, sino enfocarse, principalmente, en la Ranger.
Precisó, a su vez, que, en el mercado local, el volumen de venta de la Ranger creció 84%, así como su participación de mercado, que ascendió a 24% -en 2022 tenía una participación de 18%-. «Fue el nivel de ventas más alto de los últimos 20 años», reveló el ejecutivo durante la presentación de la nueva Bronco en el stand de la marca en Pinamar.
De hecho, el 60% de las ventas de Ford en la Argentina son de este modelo. Según datos de la Asociación de Concesionarios de Automóviles de la República Argentina (Acara), se patentaron, en 2023, un total de 13.200 unidades.
Durante los últimos días de 2023, Acara proyectaba una caída mínima del 20% para el mercado este año, a 360.000 unidades. Sin embargo, durante los primeros días de enero, la entidad readecuó su proyección a la baja, a 340.000 patentamientos. La entidad advirtió, además, que podría volver a revisar (también, a la baja) sus pronósticos. Ahora, se habla de un mercado de entre 300.000 y 315.000 unidades para 2024.
No obstante, el 70% del total de unidades que la marca del óvalo fabrica en su planta de General Pacheco, en la provincia de Buenos Aires, se envían al mercado exterior, principalmente a Brasil, Chile, Perú, México, Ecuador, Colombia, Bolivia, Uruguay, Paraguay y Venezuela.
«A pesar de que el mercado va a ser más bajo este año, proyectamos aumentar la producción en un 15%, porque creemos que hay espacio para crecer, tanto en el mercado local, como también en el exterior», develó Sebastián Trotta, director de Ventas y Marketing de Ford.
Según comentó el ejecutivo, la venta de vehículos Ford en el exterior creció un 55% en 2023, respecto a los niveles del año anterior. «Creemos que podemos crecer aún más. Pero, para eso, necesitamos capacidad de reacción, por lo que estamos acondicionando la planta para poder producir cada vez más», aseguró Trotta.
El objetivo de la automotriz es elevar de 59.000 a 63.000 unidades anuales la producción de Ranger entre 2024 y 2027. Para eso, la filial local de la empresa estadounidense consiguió el año pasado otros u$s 80 millones para radicar una planta de motores, que, según proyecciones de los directivos, estará terminada este año.
Respecto a sus planes para 2024, Galdeano comentó: «Queremos seguir creciendo en volumen con todos los productos que lanzamos en 2023. A su vez, tenemos un año activo en términos de lanzamientos».
La marca del óvalo definió, en 2020, un giro estratégico: decidió salir del negocio de autos y camiones, y focalizarse como productor de vehículos comerciales, pick-ups y utilitarios deportivos.
Esto hizo que la automotriz decidiera cerrar todas sus fábricas en Brasil -a inicios de 2021- y dejara de producir los modelos que, en su momento, aportaban dos tercios de sus ventas en la región: Ka, Fiesta y EcoSport. A fines de 2019, ya había discontinuado al Focus, sedán que se hacía en la Argentina desde su primera generación (2001).
Insumos y pagos al exterior, una problemática que afecta a toda la industria
La industria automotriz volvió a clavar los frenos. Como consecuencia del cepo, muchas terminales no accedieron a los dólares necesarios para pagar a proveedores radicados en el exterior. Por esta razón, General Motors y Volkswagen, dos terminales que debían reiniciar sus plantas esta semana, luego de casi un mes de vacaciones, no pudieron hacerlo por falta de insumos.
En tanto, en el caso de Ford, Trotta reconoció que, si bien 2023 fue un desafío para la industria automotriz, la filial argentina de la marca estadounidense no tuvo cortes inesperados en su planta.
«Seguimos con el plan de producción con el que estamos comprometidos. Estamos trabajando junto al Gobierno y los proveedores para poder garantizar algunos componentes, sobre todo aquellos materiales destinados a los productos de exportación. Por el momento, gestionamos el día a día y tratamos de evitar paros en la planta», sentenció el ejecutivo.
Según un comunicado que difundió la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC), la deuda del sector ronda los u$s 585 millones. En total, se calculan u$s 7000 millones entre terminales y autopartistas.
La situación del sector es crítica dado que, por la imposibilidad de acceder a los dólares necesarios para realizar pagos de importaciones a proveedores radicados en el exterior, se generaron «diversas paradas de líneas, grandísimas ineficiencias, sobrecostos y una grandísima incertidumbre», advierte el comunicado.