En el día de comienzo de la primavera, llegamos virtualmente a la provincia de Santa Fe para entrevistar a Nancy Barbarino, Mandataria del Automotor desde el año 2017 y especialista en gestoría náutica.
Le preguntamos…
- Para que podamos conocerte mejor, ¿nos darías algunos datos personales?
- “Si, tengo 57 años, soy soltera, no tengo hijos, pero crié a dos sobrinos que ya son hombres, tengo seis perras (una pitbull, una caniche y cuatro callejeritas), nací en Rosario y vivo desde que nací en la ciudad de Villa Gobernador Gálvez (a cinco minutos de Rosario)”.
- ¿Qué te motivó a iniciarte en la profesión?
- “Lo que me motivó iniciarme en la profesión, fue que en mi familia todos tienen vehículos y además buscaba dedicarme a esto hace unos años”.
- ¿Qué cambios observas desde tus comienzos al día de hoy?
- “Los cambios que observo al día de hoy consisten en toda la cuestión digital, los cuales tienen sus pro y sus contra”.
- ¿Creés que estas herramientas favorecieron o perjudicaron la actividad del Mandatario?
- “Las herramientas informáticas implementadas desde el 2016, favorecieron al mandatario en un 50% (para mí), ya que no todo está digitalizado y los costos no variaron con respecto a los formularios con los que trabajamos, es muy poca la diferencia”.
- ¿A esto te referís cuando mencionas los pro y los contra?
- “Sí claro, a esto”.
- ¿Qué mejorarías en la relación Mandatario – Registro – Dirección Nacional?
- “Lo que mejoraría en la relación Mandatario-Registro-DNRPA sería la comunicación. Cuando queremos comunicarnos con Dirección Nacional, a través de los canales que tenemos, ellos nos responden en un tiempo prudencial o directamente no responden. Con respecto a los Registros, la atención es buena, son muy pocos los Registros que la atención no es como una desearía. La mayoría tiene un buen trato hacia los mandatarios”.
- En el transcurso de estos años… ¿cuál te parece el mayor logro del sistema?
- “En transcurso de estos años que tengo como mandataria, el logro del sistema es muy bueno, pero podría ser mejor. El problema que encontramos todos los colegas es que no respetan al Mandatario y me refiero a que todos tenemos una matrícula, la cual año tras año debemos renovarla mediante un exámen on line y eso tiene un costo. Últimamente se nos va haciendo cuesta arriba mantener todo lo que logramos —me refiero a un alquiler de un local (como es mi caso), tener mi monotributo al día, pagar Ingresos Brutos, impuesto municipal, luz, viático, vestimenta y sin olvidarnos de la matrícula—. En Santa Fe, no todos son mandatarios nacionales nada más, en mi caso tengo una matrícula provincial, donde nos permiten hacer todo los trámites municipales en toda la provincia, si no tenemos esa matrícula no podemos trabajar haciendo las bajas y altas de los automotores. Esa matrícula se obtiene a través de un Colegio de Mandatarios, la cual también tenemos que abonar, junto una cuota mensual. Todos esos gastos sólo lo sabemos quienes pagamos y luchamos día a día para trabajar y mantener esta profesión. No me dolería si se respetaran las matrículas y nos dejaran trabajar como corresponde. Me molesta y mucho llegar a un Registro y ver como el empleado del registro ayuda al particular a hacer su trámite, mientras que a nosotros nos exigen cada día más… documentación como corresponde y cumplimiento del horario otorgado. Yo no soy ni gasista, ni plomera, ni médica, ni odontóloga, ni abogada, ni escribana, ni nada que sea una matrícula que no me corresponde sin haber estudiado esas profesiones. No puedo ejercer ninguna de esas profesiones, pero si cualquiera de ellos pueden ir hacerse un trámite en el Registro porque Dirección Nacional le da la oportunidad al particular de concurrir y sin matrícula lograr hacer todos los trámites que quieran dentro de un Registro, mientras que ellos no pagan anualmente lo que pagamos nosotros para mantener nuestras matrículas. Siento, y creo que no soy la única, que nuestro trabajo esta desmerecido un 100% y más cuando escucho decir a los particulares dentro de un Registro… me lo hice yo y me salvé de pagar una fortuna al Mandatario o Gestor. Nosotros sólo cobramos nuestros honorarios que es lo que corresponde a nuestro trabajo, pero cuando le compran un auto sin papeles o si la persona o titular no es encontrada porque se mudó o está fallecida, ahí recurren a un Mandatario para que hagamos magia o buscan de sobornarnos o implorarnos que les solucionemos el problema. De mi parte, no hago magia ni milagros, sólo hago mi trabajo y cobro lo que corresponde. Por eso me duele el manoseo que recibimos de algunas personas que piensan que nos hacemos millonarios con cada trámite que presentamos”.
- ¿En qué zona desempeñas tu profesión y cómo es la vida y la actividad registral en allí?
- “Me desempeño en mi propia ciudad, obvio que los trámites no son siempre aquí y la actividad registral en Villa Gobernador Gálvez es muy intensa. Hay muchas concesionarias y un caudal de gente importante”.
- ¿Cómo impacta el distanciamiento social en tu actividad profesional? ¿Pudiste retomar tu actividad laboral a partir de la reapertura de los Registros Seccionales el 22 de abril?
- “El distanciamiento social impactó bastante, los comercios, todos en general, debemos manejarnos con los horarios impuestos por el municipio, no es muy amplio pero algo es. Esperemos que poco a poco todo esto vaya mejorando lentamente. Los cuidados son al máximo y eso es lo que nos permite trabajar manteniendo con respeto la higiene y el distanciamiento social”.
- ¿Qué tipo de cuidados sanitarios implementaste con motivo de la pandemia para poder trabajar en condiciones seguras?
- “Los cuidados que tomé fueron los que la mayoría tomó. En mi caso, tengo un mostrador y más atrás mi escritorio. Antes de la pandemia hacia sentar a las personas delante de mi escritorio y ahora simplemente los atiendo desde el mostrador. Todos con barbijos, alcohol 70/30, la desinfección del local cada vez que abro y cierro mi oficina y cada vez que un cliente se retira de mi oficina a desinfectar todo el mostrador y todo lo que haya tocado”.
- Vemos en tu Facebook que estudiaste en la Facultad de Ciencias Médicas de Universidad Nacional de Rosario, y que sos Directora y profesora e instructora en Alfa Yoga ¿Querés contarnos algo al respecto?
- “Estudié medicina y llegué hasta 4º año, pero por razones de salud, económicas, y algunos problemitas en la familia decidí dejar de estudiar ya que no podía estudiar, trabajar, criar a mis sobrinos y atender a mi mamá que había empezado con problemas de salud. Todo no se puede en la vida y tomé una decisión muy dolorosa el dejar a pocos años de recibirme. Me retiré del magisterio, ya que fui maestra de escuela. Y como profesora de yoga desde hacía muchísimos años que venía trabajando, costeando mis estudios y afrontando los gastos que podían surgir en mi familia. Me aboqué de lleno al yoga, tengo la maestría a nivel internacional, fundé mi escuela Alfa Yoga, donde no solo di clases al público, sino que al ser una escuela, tenía la formación profesional en todo lo que era el yoga y las demás disciplinas complementarias como ser meditación, masajes, digitopuntura, rehabilitación y muchas cosas más, todo en beneficio del cuerpo y la mente. Pero un día, decidí que todo tiene un final, preferí retirarme con honores y dedicarme a lo que soy hoy”.
- Hoy en día, además de dedicarte a tu profesión, tenes hobbies o pasatiempos que desees compartir con los lectores?
- “Mis hobbies o pasatiempos son cocinar, mis plantas y prepararme para ser tía abuela, así que me compré una máquina de coser para hacer cosas a mi sobrino nieto y a la familia y obvio que para mí también”. Dentro de muy pocos años llegará mi jubilación y decidí dedicarme a todo lo que es manual, como ser, restauración de muebles, pintura, manualidades, escribir un libro y todo lo que me permita expresar mi talento interior, sin olvidarme de aprender a nadar y viajar……si la pandemia lo permite, claro”.
Verónica Rizzo