Deportista de elite al inicio de su vida, Valentina Solari, Directora Comercial de Renault Argentina, repasa junto a «CarsMagazine» su trayectoria en la industria automotriz. Se define como «súper apasionada», y asegura que son las capacidades lo que define el futuro profesional de una persona, y no su sexo o edad. Además, destaca que «esfuerzo y pasión» son las claves del éxito. Así es y así piensa una de las mujeres más influyentes del sector automotor en la Argentina…
– ¿Dónde naciste y cómo fueron tus primeros años?
– Nací hace 45 años en Gualeguay, al sur de Entre Ríos, un pueblo de 40.000 habitantes. Soy orgullosamente del Interior y toda mi familia y la de mi esposo es de ahí. Empecé a practicar tenis a los siete años y luego de muy buenos resultados, como Campeona Argentina y Sudamericana, a los 12 años tomé la decisión de irme a vivir a Buenos Aires, porque sentía que el tenis era mi pasión.
– ¿Cómo empezaste en la industria automotriz?
– Por empezar, estudié una carrera profesional. Soy Contadora Publica, y luego de recibirme hice un postgrado en Marketing y otro en Management Estratégico. En el tercer año de la carrera de grado, ingresé a una empresa de consumo masivo; y luego, en 1999, a un programa de pasantías cuando el Grupo PSA Peugeot Citroën se estaba instalando en la Argentina. Desde ese momento, la industria automotriz me fascina y la disfruto mucho. En aquel programa, trabajamos como pasantes unas 100 personas, y al cierre del proceso eligieron a tres para ingresar en un Programa de Jóvenes Colaboradores, una formación e inducción en diferentes áreas de la compañía para trabajar en el país y en el exterior. Fue un orgullo haber sido seleccionada.
– ¿Cuál era tu actitud en aquella etapa?
– Como en el deporte, siempre fui proactiva, dispuesta a aprender todo el tiempo, humilde y sin miedo a equivocarme. Eso me permite hoy brindar iniciativas que puedan ser novedosas y diferenciales. Fueron pasos muy importantes en mi carrera profesional. Además, tuve la oportunidad de trabajar en París durante cuatro años y al volver, entre otras cosas, lancé la marca DS Automobiles en la Argentina. Fue un gran desafío.
– ¿Cuál fue tu siguiente paso?
– Luego de 19 años en el Grupo PSA Peugeot Citroën, tomé una de las decisiones más importantes de mi vida laboral: un cambio profesional. Convencida, acepté un desafío que me inyectó toda la adrenalina y que sacó lo mejor de mí. Así, hoy estoy a cargo de la Dirección Comercial de Renault Argentina.
– ¿Qué responsabilidades implica ese cargo en Renault?
– Es un puesto de mucha más envergadura del que tuve en PSA Peugeot Citroën. Desde la Dirección Comercial, lidero un equipo de casi 150 personas y tengo a cargo las direcciones de Marketing y de Comunicación; de Ventas; de Desarrollo de Red; de Calidad de Servicio, que es tan importante hoy por hoy para ofrecerles a nuestros clientes la mejor experiencia; y también de Plan Rombo y de Postventa.
– ¿De qué manera trabajás con tu equipo?
– Actualmente, la tendencia de los clientes es muy diferente. Entonces, debemos estar muy atentos a cómo innovar, para lanzar nuevas iniciativas en todo el universo comercial. Es un gran desafío. Por eso, nuestro equipo de trabajo tiene un objetivo común: generar valor a la marca Renault en cada una de las unidades de negocios, y con el foco en los clientes, que son nuestros principales actores y embajadores.
– En Renault Argentina, ¿cuáles son las políticas de igualdad de género?
– Según las áreas, se modifica el porcentaje de mujeres en el plantel. En el universo de operarios industriales, alcanza al 5%. Pero es del 10% en el área de Dirección, y crece al 20% en el universo comercial. Trabajamos muy fuerte para que estos porcentajes crezcan. La diversidad y la inclusión es más que el género. Por eso, recientemente lanzamos el Comité de Diversidad. Buscamos que cada persona pueda brillar y sacar lo mejor en su lugar, en función de sus competencias y virtudes. Hay diferentes personalidades, con menos o más edad, hombres o mujeres… Cada uno siempre tiene para entregar lo mejor en base a sus competencias.
– En este tiempo, ¿cambiaron las posibilidades entre los sexos?
– En Renault no hay una función en particular para un hombre o una mujer. Se define en base a las competencias y la actitud, no por el género. Hoy la mujer es equivalente al hombre y así debe ser en la industria automotriz. Hace diez años éramos pocas mujeres en posiciones de liderazgo, pero nunca sentí una diferencia. Además, mujeres y hombres tenían la posibilidad de llegar a esas posiciones si actuaban con consistencia, actitud y humildad, dejando siempre su huella en cada una de las acciones que realizaban.
– ¿Cómo te describirías en tu trabajo?
– Soy una facilitadora para que los equipos de trabajo ejecuten. En Renault tenemos un modelo de liderazgo que comparto en su totalidad. Se basa en que como líderes, tenemos que buscar inspirar a nuestros colaboradores. Hacerlos sentir orgullosos de trabajar en nuestros equipos. Y desafiarlos constantemente a buscar cómo ser referentes en la industria.
– ¿Qué vehículo manejás actualmente?
– Una Renault Alaskan. Conducirla es un placer y me siento empoderada. Es un vehículo robusto, sólido, confiable, y comparto esos valores con nuestra pickup de producción nacional.
Fuente: carsmagazine