Cuánto cuesta preparar el auto para las vacaciones de invierno
Diario “Infobae”, 2/7/23
Algunos distritos comenzarán el 10 de julio y otros el 17. Las vacaciones de invierno ya están a la vista para muchas familias en la Argentina y al tener una duración de dos semanas, hay un gran número de personas que planifican pasarlas en destinos alejados de las grandes ciudades, para lo cual hacer el viaje en auto es económicamente conveniente si se trata de más de dos personas, en comparación con el costo de hacerlo en avión. Además, se asegura tener un medio de transporte en el lugar elegido para el receso invernal.
Destinos como los centros de esquí de Mendoza o de la Patagonia suelen ser los favoritos, aunque muchas familias también optan por el norte o la Mesopotamia, lo que implica que entre los 15 días de vacaciones probablemente dos o cuatro se consuman en viajes de más de 1.000 kilómetros, dependiendo de si se hace “de un tirón” o si se para a descansar a mitad de camino.
En cualquier caso, el auto tiene que estar en perfectas condiciones para enfrentar la ruta por tantas horas y, especialmente, para soportar temperaturas bajas, precipitaciones y terrenos resbaladizos, tanto sea por lluvia o barro si el viaje es hacia Misiones, como por nieve o hielo si es hacia zonas de montaña.
Hay dos formas de enfrentar la inspección del estado del automóvil ante un viaje. Una es hacer el mantenimiento de rutina y otra es primero llevarlo a hacer un diagnóstico computarizado integral como punto de partida. Todo depende del estado general del vehículo. Si se opta por esta última forma, el escaneo, en los talleres mecánicos convencionales tiene un costo aproximado de unos $15.000 aunque se suele utilizar como crédito para los trabajos de reparación o reemplazo de partes que hayan surgido como resultado de ese diagnóstico. Hay otros lugares donde el precio es la mitad, pero se trata de un costo fijo que se debe pagar más allá de otros trabajos que se hagan posteriormente.
Si en cambio se decide ir por las revisaciones normales y el clásico service, hay dos áreas sobre las que se debe poner atención. La mecánica del motor y todo el sistema de rodaje, que incluye neumáticos, frenos y suspensión.
El cambio de aceite y filtros, tomando como referencia un automóvil y una pick-up medianos, y utilizando aceite semisintético 10W40 como promedio, tiene un costo de $17.700 el bidón de 4 litros que se colocan en un auto, y un costo de entre $28.000 y $36.000 en una pick-up, teniendo en cuenta que según sea su motor de 4 o 6 cilindros, se cargan entre 5 y 6 litros. El líquido refrigerante anticongelante, que en zonas de bajas temperaturas es esencial para no tener “sorpresas” especialmente por las mañanas, se puede comprarse desde $3.500 hasta $5.000 dependiendo de la marca.
Yendo hacia los puntos de contacto del vehículo con el suelo, la complejidad es mayor, porque lo primero que hay que hacer es revisar el estado de desgaste de los neumáticos. Si los testigos tienen todavía la profundidad adecuada, el siguiente punto son los frenos, pastillas y discos, y finalmente se revisarán los amortiguadores, los extremos de dirección y las rótulas de parrilla y barra estabilizadora. Salvo que haya un ruido muy fuerte, que debería haberse detectado en la última VTV, en general los elementos que se suelen cambiar son las pastillas de freno, y los amortiguadores.
Tomando nuevamente como parámetros un auto mediano y una pick-up, los costos de referencia que se encuentran en un centro integral del automóvil como Norauto, son los siguientes. Cambio de pastillas y discos de freno tiene para un automóvil un costo de $30.000 y discos $65.000, y para una camioneta $38.000 y $122.000 respectivamente. A estos precios se debe adicionar la mano de obra, que es de $9.700 en el tren delantero y $10.800 en el tren trasero indistintamente si es un auto o una pick-up.
En el rubro de los amortiguadores, si es un automóvil el costo es de unos $100.000 por los cuatro elementos, mientras que para una camioneta mediana el valor asciende a unos $130.000 de promedio para las cuatro ruedas.
Finalmente, si hay que reemplazar los neumáticos, se enfrentará el costo más alto de aquellos que tiene revisar y preparar un auto para un viaje de más de 1.000 kilómetros. Ya no hay problemas de suministro de materia prima, por lo tanto, no hay sobreprecio en las ruedas de un vehículo, pero los números son igualmente altos.
Tomando un neumático promedio, en el caso de un auto de una medida 195/55 R15, los cuatro neumáticos están en el orden de los $415.000, y si en cambio, se trata de una cubierta para una pick-up mediana, con una medida de 265/65 R17, las cuatro unidades pueden costar aproximadamente $860.000. En la mayoría de las grandes tiendas de neumáticos hay descuentos por pago en efectivo, en Norauto es del 30%, o en su defecto se pueden comprar también en 12 cuotas sin interés.
Lo último que queda por hacer en el auto, una vez que se ha decidido cambiar alguno de estos elementos que hacen a la estabilidad sobre el piso, es cuando se debe hacer la alineación y el balanceo, nunca antes de un reemplazo de alguna pieza de suspensión, porque al hacerlo habrá que volver a alinear las ruedas del vehículo. Estos dos controles y correcciones tienen un costo de $10.000 tanto para autos como camionetas.
Hay algunos precios que siempre es bueno conocer antes de un viaje. Hay elementos que cada tanto tienen vencimiento, como el matafuegos, o se rompen con el uso como los triángulos de baliza. El matafuego redondo de 1kg tiene un costo de $6.490 mientras que el juego de balizas está en un precio de $2.200. También puede ser necesario reemplazar las escobillas de limpiaparabrisas, que tienen un costo aproximado, dependiendo del modelo de auto, de entre $4.500 y $7.000.
Y algo que no se puede medir su desgaste porque funciona hasta que deja de hacerlo, generalmente sin aviso, es la batería. Su precio puede costar entre $30.000 y $50.000, y para saber si está cerca del límite de uso, hay que tener en cuenta que la vida útil oscila entre los dos y tres años, dependiendo de si el alternador y el arranque no genera un desgaste prematuro.
