“Cero pomposidad. Vamos a empezar como corresponde”. Con esas palabras, el presidente electo Alberto Fernández anunció a la prensa cómo será el protocolo de su asunción, que se realizará este 10 de diciembre en el Congreso.
Fernández informó que el auto elegido para trasladarse desde su residencia en Puerto Madero hasta la ceremonia de jura será su vehículo personal: un Toyota Corolla.
En el entorno del nuevo mandatario señalaron que la intención será transmitir un “mensaje de austeridad”. De esta manera, buscará diferenciarse del presidente saliente, Mauricio Macri.
Cuando asumió el 10 de diciembre de 2015, Macri salió de su departamento en Palermo con una Touareg Hybrid prestada por Volkswagen Argentina. En el garage también había un Prius facilitado por Toyota Argentina. Macri intentó enviar un mensaje de modernidad y ecología. Se decantó por la Touareg por una cuestión de mayor confort, para trasladar a su familia.
La Touareg Hybrid fue discontinuada seis meses después por VW Argentina. El modelo quedó afectado por los impuestos internos, que el Gobierno de Macri había prometido eliminar, pero mantuvo a lo largo de todo su mandato.
Todavía no se sabe en qué vehículo viajará Fernández desde el Congreso hasta la Casa Rosada, donde recibirá el bastón de mando. Podría ser la Mercedes-Benz Vito blindada, que Macri encargó a ESP Blindajes y que quedará en la flota del Ejecutivo. La Vito fabricada en la Argentina se dejó de producir siete meses después, también afectada -entre otros problemas de competitividad- por los mismos impuestos internos.
En el transcurso del Gobierno de Macri se ordenó la restauración del Cadillac descapotable, que fuera utilizado por Juan Domingo Perón y varios mandatarios para sus desfiles de asunción. El vehículo está en condiciones de funcionamiento y se encuentra exhibido en el Museo de la Casa Rosada, ubicado en el subsuelo de la sede del Ejecutivo.
Fuente: Autoblog.com