Jorge Pesado Castro, representante para Santa Fe de Acara y concesionario Citroën, Hyundai y Chrysler, entre otras marcas, explicó “La demanda está sostenida, lo que está faltando es producto por las autorizaciones de las SIMI tanto de modelos importados como de autopartes para fabricar los nacionales”.
No obstante, el empresario santafesino remarcó que el sector lleva casi 400.000 unidades producidas y 380.000 patentadas, con una incidencia del 53% de autos nacionales vendidos y el 47% restante importado. De acuerdo con Pesado Castro, esa relación hasta el año pasado era de 30-70. “En ese aspecto es un progreso porque se exportó mucho, pero en el mercado interno todavía tenemos la materia pendiente por resolver, que es la faltante de mercadería”, subrayó.
Ante este escenario, en los concesionarios sucede en varias ocasiones que algunos compradores que buscan un determinado modelo terminan realizando la operación por otro similar. “Siempre se trata de ofrecer productos alternativos, lo más parecidos posible en cuanto a tipo y precio”, expresó el directivo de Acara.
Consultado por los segmentos más demandados, especificó que “buena parte se la llevan las pick ups y otra parte los medianos”, liderados por el (Fiat) Cronos, “que fue el más vendido en el año, aunque Toyota fue la marca que más patentó”, puntualizó. En tanto, “el segmento de los pequeños tuvo menos participación”, agregó.
En lo que respecta a importados, los más solicitados fueron los de categoría premium, al tiempo que otros vehículos, como los de origen asiático, por ejemplo, “se vieron un poco afectados con la distribución de las solicitudes de importación”, indicó Pesado Castro y añadió: “Durante el segundo semestre, la cifra se redujo bastante y se estaba trabajando con unas 10.000 u 11.000 unidades importadas por mes”.
Por último, en relación a la modalidad de compra, el representante de Acara en Santa Fe detalló que la financiación ocupa el 30% de las transacciones y, de ese guarismo, el 70% corresponde a planes de ahorro, con preponderancia de las propias empresas financieras de las terminales y los bancos, “que ofrecen tasas de mercado, del 30, 35 o 40%, o tasas promocionales”.
“En el primer semestre, la suscripción a planes de ahorro había aflojado mucho, pero en el segundo, con la reactivación, volvió a crecer en volumen y calculo que se está terminando el año con entre 250.000 y 300.000 planes suscriptos, que son ventas diferidas. Algunas se pueden caer, pero el resto van a ser unidades que se van a entregar”, destacó Pesado Castro y finalizó con una proyección de patentamientos para el 2022 “Se estima un crecimiento suave, con unas 420.000 unidades”.
Fuente: On24