Especulado desde el debut de la nueva generación, poco a poco se va conociendo el proyecto que dará pie al lanzamiento de la inédita variante puramente eléctrica de la Ranger. El proyecto está en pleno desarrollo y debería llegar al mercado a finales de esta década, siendo parte estratégica del ambicioso plan de electrificación de Ford.
En una entrevista reciente, el director financiero global de la marca, John Lawler, afirmó que el Ranger EV, se producirá en Tailandia y que el país se convertirá en un importante centro de producción de vehículos de este tipo. “Tailandia será un centro para la fabricación de vehículos de cero emisiones”, dijo. “A medida que estos cambios (a los vehículos eléctricos) lleguen a todo el mundo, seamos parte de ellos. Lo verás viniendo de Ford”.
La expectativa es que, desde Tailandia, la Ranger eléctrica se exporte no solo a Asia y Oceanía (como ocurre actualmente con las versiones de combustión), sino también a mercados europeos donde la transición a la electrificación está avanzada. Casualmente (o mejor dicho, no por casualidad), Ford solicitó en el Viejo Continente la reserva comercial del nombre “Ranger Lightning”, siguiendo la misma nomenclatura adoptada por las F-150 EV.
Los detalles sobre el proyecto aún son limitados, pero Ford ya dio pistas sobre sus proyectos en el segmento. El CEO del óvalo azul, Jim Farley, confirmó que hay planes muy avanzados en este sentido: “Ya estamos trabajando en otra camioneta eléctrica que será diferente a la F-150 Lightning”, reveló algunos meses atrás.
Ford nunca ocultó que desarrolló a la nueva generación de Ranger preparada para la electrificación. El primer paso en esta dirección será el lanzamiento de una variante híbrida que tendrá lugar en 2024 y servirá para preparar el terreno para la versión puramente eléctrica.
A mediados de 2023, Ford lanzará a la venta la nueva generación de la pick-up mediana Ranger (Proyecto P703) que será producida en la planta de General Pacheco, la cuál recibió una inversión de 580 millones de dólares destinados a lo que la marca definió como “transformación más importante que ha atravesado esta fábrica en sus 60 años de historia”.
Las versiones para nuestro mercado serán turbodiesel, pero gracias a las exenciones tributarias, no sería descabellado que la casa del óvalo importe las versiones electrificadas, y quizás hasta se llegue a producir una variante híbrida en el país, aunque no hay información certera sobre eso.
Fuente: Motor1